La población europea envejece y aún más en nuestro país. Nacen menos niños y las expectativas de vida tanto en hombres como en mujeres aumenta, gracias, sin duda, a la medicina y a las condiciones de vida de las que disfrutamos en esta parte del mundo civilizado. Vamos a hablar de nuevas tendencias en viviendas para mayores ya que, no solo son un grupo poblacional muy numeroso, sino también porque los mayores de ahora nada tienen que ver con los de hace algunas décadas.
Nuevas tendencias en viviendas para mayores. Los abuelos del presente y del futuro
Los países desarrollados englobados en lo conocido como primer mundo miran cada vez más hacia las personas mayores. Esto se debe a varios factores:
1.-Aumento en el nivel académico, profesional, cultural y de poder adquisitivo
Los mayores de hoy en día, y los que lleguemos a esa consideración en un tiempo no muy lejano, pertenecen a generaciones que han dado un gran salto respecto de las anteriores. Cuentan con mayor nivel a la hora de reivindicar una serie de decisiones y de mejoras que deberán que afectar a todo lo que tendrá que ver con los últimos años de sus vidas.
2.-Conciencia de sus necesidades y de la situación social
Esos mismos mayores entienden que socialmente las cosas han cambiado, y ya son pocas las familias que asumen los cuidados de sus mayores, más cuando alcanzan un alto grado de dependencia.
3.-Las políticas sociales están en transición
Porque los países con mayores avances en este terreno están en plena transición desde el modelo que ya conocemos, un modelo clásico centrado en las residencias, hacia otro con un sentido más orientado al concepto de hogar.
Los ancianos del futuro tenderán a plantearse estas cuestiones para poder inclinarse hacia el deseo de procurar estar todo su ciclo vital en lugares que sean considerados como hogares.
Los nuevos modelos de vivienda
Es por ello que, encontraremos nuevos modelos de viviendas en lo que a las personas mayores se refiere. Estas viviendas estarán destinadas a ser los hogares de nuestros mayores hasta el final de sus días, por lo que deberán ser más accesibles, estar adecuadas para adaptarse a los diferentes grados de dependencia. Estas son algunas de las nuevas tendencias en viviendas para mayores.
1.-Cohousing
Es un tipo de vivienda que está teniendo mucho éxito entre los mayores de aquí, en España. El concepto es de vivienda colaborativa en modo cooperativa, evitando la propiedad y el alquiler.
También conocido como cohousing senior, la idea parte de un concepto de viviendas pequeñas con servicios comunes. Todas cuentan con lo mas imprescindible en cuanto habitabilidad, baño, cocina, salón y habitación, y se inserta en una urbanización que cuenta con el resto de los servicios necesarios, limpieza, salas de ocio, comedores, zonas ajardinadas, gimnasio…además de lo más imprescindible, servicio médico o de enfermería 24 horas.
Todo ello pasa por la necesidad de sentirse acompañados dentro de la independencia que facilita la propia vivienda. Asimismo, se entra en una dinámica en donde la soledad no se contempla y todas las decisiones pasan por una comunidad que se autogestiona.
Existen algunas dudas aún al respecto de la configuración de estos espacios, su diseño, sobre todo, ya que las condiciones de los mayores varían con el paso de los años y vienen asociadas a situaciones de una mayor o menor dependencia.
2.- Apartamentos + servicio
Es una alternativa muy parecida al cohousing pero con una diferencia clara que alude a la gestión y otra al nivel de dependencia. En este caso tendríamos un núcleo de apartamentos sencillos pero completos, que cuentan con su habitación, baño, cocina y salón. Hasta ahí todo igual.
Los servicios que se consideran imprescindibles también son muy similares. En la zona baja del edificio, encontraremos salones comunes para ocio, cafetería, salón de belleza y asistencia médica entre otros.
Aquí el acceso a la vivienda es por alquiler o compra para mayores que no tenga un grado avanzado de dependencia. Además, la gestión no se realiza de manera comunitaria, sino que la realiza una empresa.
3.-Viviendas comunitarias
Las viviendas comunitarias son también apartamentos accesibles con la misma configuración básica de cocina, baño adaptado, salón y dormitorio. Los habitantes de estos apartamentos, aunque mayores, realizan una vida normal, por lo que están indicados para aquellos que disfrutan de gran autonomía.
En estas nuevas tendencias en viviendas para mayores , con un número reducido de mayores, se conserva la intimidad y la independencia de los núcleos residenciales. Los servicios indispensables se encuentran muy cerca, y hay libertad absoluta de horarios a la hora de recibir visitas.
En un mismo espacio conviven estas viviendas tuteladas con otros servicios públicos como un centro deportivo, una plaza o un parque.
4.-Edificios mixtos intergeneracionales
Un claro ejemplo de este tipo de iniciativa la encontramos en España. Un programa social municipal concibió un edificio con viviendas intergeneracionales a la que servía de apoyo un centro de salud cercano y un centro de día.
Con esta iniciativa se trató de que los mayores residentes, que disfrutan de los espacios adaptados para ellos, compartan su día a día con vecinos jóvenes que inician sus vidas en el mismo lugar.
El principal objetivo es la calidad de vida de los mayores que se conjuga con facilitar a los jóvenes una vivienda y que ambos se planteen una convivencia que aporte un entorno de confort e interactuación.
5.-Pueblos para dependientes
No es un concepto excluyente, si no más bien la opción que permita a este tipo de personas con problemas de demencia una vida más afín a la que han tenido sin dejar de lado su atención y cuidados.
Concretamente, en Holanda, se puso en marcha esta comunidad donde solo residen mayores demenciados en diferente grado. Las viviendas se comparten por un número reducido de ellos, procurando la afinidad para favorecer la convivencia.
La supervisión viene de la mano de profesionales que vigilan con discreción e intervienen con prudencia, permitiendo que los mayores hagan una vida lo más normal dentro de sus posibilidades, ir a un restaurante o al supermercado, ver una función de teatro…
El envejecimiento de la población lleva a entender estas nuevas tendencias en viviendas para mayores como una alternativa para procurarles la mejor calidad de vida. Además de la planificación, estudio y propuestas, es importante pensar en que las administraciones deben desarrollar una eficaz política para favorecer la adaptación de las casas que ya existen y están o estarán habitadas por mayores. La falta de ascensores, rampas accesibles y eliminación de barreras arquitectónicas, es la gran asignatura pendiente mientras se desarrollan estas nuevas soluciones habitacionales.